La ciudad de Montevideo, capital de la República Oriental del Uruguay, se encuentra ubicada sobre el Río de la Plata al sur del país, limitando con el departamento de San José y Canelones. Tiene una extensión de 530 km2. Su Aeropuerto Internacional, Carrasco, recibe vuelos de todas partes del mundo, especialmente de Argentina, Brasil y las ciudades capitales de Europa.
En tan solo 30 minutos de vuelo -o tres horas en ferry-, se llega desde Buenos Aires hasta Montevideo, una ciudad que para muchos viajeros del mudo, aún es un sitio por descubrir.
Historia de Montevideo
Montevideo es la capital más joven de América Latina, fue fundada entre los años 1724 y 1730 por el Gobernador de Buenos Aires, Don Bruno Mauricio de Zabala. Nació por razones estratégicas de la Corona Española, que buscaba consolidar allí la segunda plaza fuerte de América (la primera fue Cartagena de Indias). La ciudad de San Felipe y Santiago de Montevideo, tal como la llamó el Gobernador Zabala, fue poblada por habitantes de las Islas Canarias que se sumaron a otras familias venidas desde Buenos Aires. Su diseño original fue el de la típica ciudad colonial en forma de damero y rodeada de murallas.
Por su riqueza ganadera y su inmejorable situación geográfica, creció como ciudad-puerto hasta convertirse en la capital de la República Oriental del Uruguay. Montevideo es una ciudad con niveles de calidad ambiental ejemplares, con focos de contaminación controlables y con una población que tiene un alto nivel educativo y cultural. Por estos y otros motivos, es hoy la capital administrativa del Mercosur, unión política y comercial que se establece entre Argentina, Brasil, Paraguay, Chile y Venezuela.
En efecto, la ciudad de Montevideo no cuenta con un monumento significativo, como pueden ser el Coliseo Romano, el Taj Mahal o el Corcovado de Río de Janeiro y no posee maravillas de la naturaleza como el Glaciar Perito Moreno, el Monte Everest o las imponentes rocallosas canadienses, pero posee de manera significativa y es de sus atractivos principales, la calidad humana de su gente. Es la ciudad capital más segura del continente sudamericano y el nivel cultural de quienes la habitan hacen que se destaque entre sus pares del continente como la ciudad más limpia entre ellas.
Si bien es el centro administrativo, comercial, financiero y la ciudad más poblada del país, Montevideo brinda a locales y visitantes ese aire puro y ambiente relajado que hacen que quien se anime a conocerla y disfrutarla, jamás se arrepienta de ello y que, por el contrario, vuelva en cualquier oportunidad.
Atractivos de Montevideo
Tomar un café en alguno de los variados bares de sus plazas; disfrutar de un buen asado en el Mercado del Puerto; saborear un típico “chivito uruguayo” en uno de los restaurantes de “La Pasiva”; caminar por la “Rambla” o costanera a lo largo de sus más de 30 kilómetros de extensión; recorrer la Ciudad Vieja y maravillarse con las reliquias de la era colonial; visitar la Fortaleza del Cerro y ver en perspectiva y desde la altura la bahía, el puerto y gran parte de la ciudad; comprar artesanías o ropa confeccionada a mano en las ferias de Villa Biarritz o del Parque Rodó; asistir a una función de la Comedia Nacional en el recientemente restaurado Teatro Solís; tomar una “uvita” en el clásico bar restaurante Fun-Fun o simplemente entremezclarse con la cultura e idiosincrasia del montevideano y tomar “unos mates”, son algunas de las actividades que no se pueden dejar de realizar en esta ciudad, joya del Río de la Plata.
Montevideo es una ciudad “al aire libre” y amante de los deportes. No dejes de visitar el Estadio Centenario, monumento histórico del futbol mundial y sede del primer campeonato mundial de 1930. Si el golf es de tu interés, en Punta Carretas, en donde ya se instalaron varios hoteles de primer nivel, se encuentra el Club de Golf de Montevideo, considerado por los expertos, como uno de los mejores campos de Golf de Latinoamérica y en donde se puede “jugar con vista al mar”.
Si visitas la ciudad entre los meses de Noviembre y Marzo, podrás disfrutar de la más variada gama de actividades “de playa” entre las que se destacan los conciertos musicales al aire libre, torneos de diferentes deportes de playa como el beach volley y el futbol o simplemente asolearse en sus arenas blancas o bien tomar un baño en el Río de la Plata. Hazlo con la mayor tranquilidad, ya que la seguridad en estas zonas está plenamente garantizada.
Cultura y fiestas
Parte de la cultura montevideana son el Tango y el Candombe. Te encontrarás en cualquier esquina del centro de la ciudad con “boliches” de Tango y Milonga, donde la gente ya más entrada en años asiste para bailar al ritmo del “dos por cuatro”; te toparás en algún callejón de los barrios Sur y Palermo con pequeñas “comparsas” de afro descendientes con sus clásicos tambores Chico, repique y piano que con su tronar animan las tardes y nochecitas de la ciudad.
Si llegas a Montevideo en el mes de Febrero, te encontrarás con la mayor fiesta popular del país, el Carnaval, reconocido a nivel mundial como el más largo del mundo, ya que la fiesta dura más de un mes, con un inimaginable despliegue artístico, de sonido y vestuario, que encuentran en el Teatro de Verano Ramón Collazo su catedral del alma, cuna de poetas y artistas, hoy reconocidos a nivel mundial.
Desde Montevideo se llega por carretera hacia el este del país, en un recorrido de no más de una hora y media a Punta del Este, considerada hoy como el destino de veraneo de mayor glamour y sofisticación de todo el continente americano. Si te diriges hacia el Oeste, en no más de dos horas y media, llegará a la ciudad de Colonia del Sacramento, patrimonio histórico de la humanidad declarada por UNESCO.
No dejes de visitar Montevideo, súmalo a tu itinerario de viaje por Sudamérica y vive en carne propia lo que a continuación te contamos en ésta “Canción a Montevideo”:
“Con su voz marinera encantada, viene un viento inventor de avenidas, viene un cerro patrón de miradas, que va hundiéndose allí en la bahía, vienen sueños, vienen pueblos…
Con su voz de boliches y grillos, vienen soles de ropa tendida, ciudadela de muros heridos, preguntando qué fue de la vida, vienen cielos, vienen fuegos…
Viene amar, viene amar, viene amar a este Montevideo.
Vienen los sombreros, llenos de tranvías, vienen los tambores llenos de glicinas. Vienen las sirenas, la radio prendida, y en medio del temporal… viene un tango en un estuche de malvón, a llorar porque ha perdido la ciudad, vienen navidades, gorriones antiguos, cantores de carnaval.
Esos techos de rambla infinita, esas voces con techos de nada todo viene a esta mansa bahía, mar de fondo de nuestras palabras, viene, duele, cae en la hondura, de cada soledad.
Viene amar, viene amar, viene amar a este Montevideo”.
Muy apetecible ¿No? Montevideo te espera con esto y mucho más.
Más información: http://www.descubrimontevideo.uy/es
